El Museo de Arte de Dallas exhibe cinco obras exquisitas de la aclamada pintora mexicana Frida Kahlo. Durante su vida, las obras de Kahlo eran conocidas en los círculos artísticos, particularmente en México y Estados Unidos.
En los años transcurridos desde su muerte en 1954, sus obras han recibido una atención crítica cada vez mayor y elogios internacionales. Hoy, su fama está tan extendida que ha pasado de ser simplemente una artista célebre a un fenómeno cultural global.
«Frida Kahlo: Cinco obras», que se inaugurará el 28 de febrero de 2021, incluye cuatro pinturas y un dibujo prestados de una colección privada, cortesía de la Galería Arvil en la Ciudad de México. En la nueva instalación, cada obra actuará como un vehículo para comprender aspectos más amplios de la práctica artística de Kahlo.
Esto incluye su desarrollo de un lenguaje personal de imágenes metafóricas y su exploración de la pintura de naturaleza muerta al final de su carrera. Al mismo tiempo, como es el caso con muchas de sus obras más conocidas, estas piezas reflejan las experiencias de Kahlo y los acontecimientos de su vida aventurera.
«Frida Kahlo: Cinco obras» se expondrá hasta el 20 de junio de 2021 en el mirador del atrio en el nivel 4 y se inaugura simultáneamente con Devotos: Arte y espiritualidad en México y Nuevo México, que presenta obras de la colección latinoamericana del DMA.
Ambas exposiciones son organizadas por el Dr. Mark A. Castro, el Curador Jorge Baldor de Arte Latinoamericano, y están incluidas en la admisión general gratuita.
En «Frida Kahlo: Cinco obras», se incluyen las siguientes:
Vista de Nueva York (1932)
Un dibujo que captura la vista desde la ventana de Kahlo en el Barbizon Plaza Hotel, donde ella y su esposo, Diego Rivera, se hospedaron durante un segmento de su estadía en Estados Unidos.
Diego y Frida 1929–1944 (1944)
Que aún se conserva en el marco original cubierto de concha seleccionado por Kahlo, es un recuerdo personal creado por la artista para conmemorar su relación de 15 años con Rivera.
Sol y vida (1947)
En esta, Kahlo se basa en su amplio conocimiento del arte y la espiritualidad a lo largo de la historia para tejer una intensa reflexión sobre el ciclo de la vida y la muerte.
Naturaleza muerta con perico y bandera (1951) y Naturaleza muerta (1951)
En ambas vemos a Kahlo explorando el potencial de un género que dominaría sus últimos años: el bodegón. En las dos obras, Kahlo traspasa los límites de la pintura tradicional de naturaleza muerta, transformando sus conjuntos de frutas, símbolos nacionales y antiguos artefactos nativos de México en cavilaciones sobre su propia identidad.
Uno de los aspectos más interesantes de Frida Kahlo: Cinco obras será una revisión de tres de las pinturas de Kahlo realizada por Castro y la Conservadora de Pinturas del DMA Laura Hartman utilizando técnicas no invasivas de sacar imágenes como la radiografía X y la fotografía infrarroja. Estas técnicas, que nos permiten mirar debajo de la superficie de las obras de Kahlo, ofrecerán nuevos conocimientos sobre cómo pintaba.
«Frida Kahlo: Cinco obras» está organizada por el Museo de Arte de Dallas. El Museo de Arte de Dallas es apoyado, en parte, por la generosidad de los miembros del DMA y donadores, el National Endowment for the Arts, la Texas Commission on the Arts y los ciudadanos de Dallas a través de la Oficina de Artes Cultura de la Ciudad de Dallas.
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