Il Federación Internacional de Automovilismo (FIA) investiga al piloto Lance Stroll por su mal comportamiento durante las actividades del Gran Premio de Qatar, las cuales podrían costarle en algunas sanciones.
El canadiense es hijo de Lawrence Stroll, dueño de la escudería Aston Martin y tras quedar en el sitio 17 de la Calificación, sin poder avanzar a la Q2 y Q3, le dejó una gran frustración.
Se dice que al bajar del AMR23 fue a los garajes y habría empujado a su preparador físico Henry Howe, quien lo trataba de dirigir a la balanza de la FIA, trámite que se considera obligatorio al finalizar cada actividad.
Más adelante, cuando debió atender a los medios de comunicación en zona mixta, se mostró con pocos ánimos para hablar, se dio la vuelta y se fue. Esto fue molesto para los periodistas, ya que existen pocos espacios para charlar con los pilotos de la Fórmula 1.
Lo único que dijo fue que: «odia tener malos días», tras estos incidentes en Lusail.
Por ahora, Stroll terminó en el sitio 11 en Qatar y se quedó sin poder sumar unidades. Es décimo en el campeonato con 47 unidades y su mejor resultado es un cuarto sitio en Australia.
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