Rory McIlroy, uno de los jugadores que siempre se pronunció en contra de la existencia del LIV Golf y de los jugadores que abandonaron la PGA Tour para militar en la nueva liga árabe, no le quedó más remedio que aceptar la fusión entre las ligas, pero no de la mejor manera.
«¡Todavía odio a LIV! Odio a LIV. Espero que desaparezca y espero que así sea», comenzó el experimentado golfista.
«Es difícil para mí no sentarme aquí y sentirme como un cordero sacrificado, y sentir que me expongo…» expresó el cuatro veces ganador de Majors.
«Retirándome de la situación, veo cómo esto es mejor para el juego de golf, no se puede negar», opinó, quien a fin de cuentas vio esta historia con una mirada optimista.
McIlroy junto a Tiger Woods fue de los más grandes críticos y al norirlandés le costó su amistad con el español Sergio García, quien si optó por cambiar de aires.
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