El Silestone Institute, plataforma internacional de investigación y divulgación de conocimiento sobre el espacio de la cocina de Cosentino, comparte estos cuatro consejos para lograr este cometido:
1. Conserva tu espacio de trabajo despejado
Las superficies de tu cocina deben estar libres y limpias, listas en todo momento para preparar comida y cocinar cómodamente. Es importante asegurarte que los utensilios o equipo que más utilices estén siempre disponibles. Guarda las tablas de picar, instrumentos de cocina y frascos en cajas para acceder a ellas fácilmente. Considera también instalar un estante para colgar utensilios como cucharas o cocinas. Podrías también liberar una pared de la cocina con una barra para colgar pequeños accesorios para el uso diario.
2. Almacena los artículos de forma eficiente
Para ahorrar espacio, apila los platos, bowls y vasos por tamaño, aunque nunca más de tres al mismo tiempo. Si cuentas con cajones lo suficientemente grandes, puedes adaptar separadores de madera en la base de éstos para conservar los platos de forma vertical, a la vista y ordenados en todo momento. Otra recomendación, es usar bandejas removibles cuando los gabinetes se encuentran en una esquina o muy profundos, de forma que puedas acceder a los utensilios dentro de éstas de forma rápida y sin tener que sacar todo para encontrar lo que buscas.
3. Pon en orden tu alacena
La mejor manera de mantener tu alacena ordenada es no acumular.
- Correcto almacenamiento de productos: La forma ideal de almacenar los productos en ésta es colocando los artículos más pesados (como líquidos, por ejemplo) en los gabinetes inferiores y el resto, en los superiores, siempre con solo dos filas de productos. En la primera fila deberán estar los artículos que están próximos a caducar. Coloca aquellos que utilices de forma más frecuente en los espacios a la altura de la cintura, donde tendrás un acceso mucho más fácil a ellos cuando cocines.
- Reserva un lugar especial para condimentos: esto libera espacio y te permite encontrar lo que necesitas mucho más rápido.
- Etiqueta todo: ordena los productos por nombre o categorías, de forma que cuando cocines nunca te confundas.
4. Regresa las cosas a su lugar
Después de ordenar y determinar el espacio para cada cosa, siempre recuerda regresarlos a su lugar una vez que los hayas utilizado. Al hacer esto, tu cocina se mantendrá limpia y ordenada por mucho más tiempo.
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