El Sevilla volvió a demostrar que está hecho para gobernar en la Europa League, al escribir otra noche histórica en la Arena Puskas de Budapest y cosechar su séptima estrella en el torneo de la UEFA.
No fue fácil. Tuvieron enfrente a la AS Roma de José Mourinho, otro gran especialista para ganar trofeos en el Viejo Continente y tras un 1-1 en tiempo regular y que se extendió en tiempo extra, se tuvo que definir en tanda de penales para un final de 4-1 a favor del conjunto andaluz.
El equipo italiano se fue al frente con gol de Paulo Dybala al 34’ y el empate se dio hasta el 55’ con autogol de Gianluca Mancini.
Este duelo tuvo sus momentos polémicos como un penal marcado por el árbitro a Ocampos al 75’, pero el VAR lo echó para atrás para sorpresa del Sevilla. Es más, el mismo Mourinho lamentó que el arbitraje estuviera favoreciendo al rival español.
Pero, en general, fue un partido con algunas emociones, cerrado y con muchas faltas y tarjetas amarillas (13 en total: 6 para Sevilla y 7 para Roma).
Sevilla tendrá una temporada de pesadilla en La Liga al estar en el sitio 11, pero le alcanzó para ganar su séptima Europa League (2006, 2007, 2014, 2015, 2016, 2020 y 2023).
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