Mercedes-Benz no se conforma con su legado en la Fórmula 1 —donde ha conquistado ocho títulos de constructores en 75 temporadas—, ahora también se alinea en la parrilla de salida del entretenimiento global. En una jugada estratégica que combina ingeniería, marketing y cultura pop, la marca ha dado un paso más allá al asociarse estrechamente con la esperada película de Brad Pitt sobre la máxima categoría del automovilismo. El resultado es una colaboración sin precedentes que dio lugar al exclusivo Mercedes-AMG GT 63 “APXGP Edition” 2026, presentado como parte de las celebraciones del Gran Premio de Miami.
Más que una edición limitada: un tributo al cine y al deporte
El vehículo en cuestión es una edición especial profundamente ligada al filme producido por Apple Original Films y dirigida por Joseph Kosinski (Top Gun: Maverick). Esta colaboración entre Hollywood y la élite automotriz se materializa en un coupé 2+2 que fusiona el espíritu cinematográfico con la identidad de alto rendimiento de AMG.
El GT 63 “APXGP Edition” se basa en el modelo GT 63 tradicional, equipado con un motor V8 biturbo de 4.0 litros que entrega 577 caballos de fuerza, acoplado a una transmisión automática AMG de nueve velocidades. A diferencia del modelo más potente de la gama, el SE Performance de 805 CV, esta edición apuesta más por el diseño y la estética que por mejoras de rendimiento.
Aun así, no se queda corto en deportividad: cuenta con el sistema de tracción total 4Matic+, dirección trasera activa, suspensión adaptativa AMG Active Ride Control y un completo paquete aerodinámico en fibra de carbono, que incluye splitter delantero, difusor trasero y alerón fijo.
Detalles que hacen la diferencia
El diseño de esta edición limitada es lo que realmente la distingue. El vehículo presenta un acabado especial denominado “APXGP Edition”, con un esquema de pintura oscuro y un motivo de diseño artesanal que incorpora el color “Race Gold” de la marca. Este tono está presente en la parrilla, los guardabarros delanteros, el faldón trasero, el difusor y, por supuesto, en las llantas AMG forjadas de 21 pulgadas en diseño Cross-Spoke.
Otros guiños visuales al universo de la película son el patrón de bandera a cuadros en los flancos delanteros y los logotipos del equipo ficticio APXGP que aparecen en varias zonas del vehículo. El interior tampoco se queda atrás: asientos con costuras doradas, paneles de puertas con inserciones en fibra de carbono, y un volante AMG que combina funcionalidad con estética de competición.
En cuanto a tecnología, incluye el sistema AMG Track Pace —que registra datos en pista— y un sistema de audio Burmester de 1170 vatios con 15 altavoces, pensado para aquellos que disfrutan del lujo incluso al volante.
Cine y velocidad: una narrativa compartida
La película protagonizada por Brad Pitt gira en torno a Sonny Hayes, un veterano piloto en busca de redención, quien regresa a la F1 para competir junto a un joven talento, interpretado por Damson Idris. Ambos forman parte del equipo APXGP, dirigido por el personaje de Javier Bardem. La película se filmó en pistas reales de Fórmula 1 durante fines de semana de carreras, buscando una autenticidad pocas veces vista en este tipo de producciones.
La implicación de Lewis Hamilton como coproductor garantiza un enfoque riguroso en cuanto a la representación del deporte, y Mercedes ha jugado un rol esencial al proveer vehículos, logística e incluso asesoría técnica para que cada escena transmita realismo puro.
Solo 52 unidades: exclusividad garantizada
El Mercedes-AMG GT 63 “APXGP Edition” 2026 estará limitado a únicamente 52 unidades para todo el mundo. Más que un coche, se trata de una pieza de colección que captura un momento cultural único: la intersección entre la Fórmula 1, el cine y el diseño automotriz de élite.
Esta colaboración entre Mercedes y Hollywood marca un antes y un después en cómo las marcas de lujo pueden posicionarse más allá de su industria. La edición especial “APXGP Edition” no solo es un tributo estético, sino una declaración de intenciones: Mercedes no solo lidera en las pistas, también quiere dominar el relato cultural que rodea al automovilismo.
Si bien algunos podrían argumentar que la falta de mejoras de potencia limita su atractivo frente a otras versiones AMG, lo cierto es que el valor de este vehículo no está solo bajo el cofre, sino en su capacidad para contar una historia. Es un objeto de deseo para coleccionistas, fanáticos de la F1, cinéfilos y amantes del diseño automotor.
Con solo 52 unidades disponibles, esta edición se convertirá, sin duda, en una pieza de culto. Y si la película resulta ser tan emocionante como lo sugiere el tráiler, Mercedes habrá logrado algo que pocos fabricantes pueden presumir: acelerar en la pista y en la taquilla al mismo tiempo.