El salón Watches and Wonders ha dejado grandes sorpresas en el mundo de la Alta Relojería. Esta edición digital que muestra los lanzamientos de las casas más importantes del mundo, ha servido para que A. Lange & Söhne muestre al mundo sus nuevos modelos.
Cuando A. Lange & Söhne presentó en 2018 el Triple Split, la prensa especializada internacional lo aclamó como novedad mundial. El único cronógrafo con ratrapante del mundo hasta la fecha, capaz de añadir y comparar tiempos hasta una duración de 12 horas, es exclusivo en su categoría. Ahora le sigue un modelo con caja de oro rojo y esfera azul.
A la edición de entonces de oro blanco con esfera gris le sigue ahora una segunda variante (también limitada a 100 ejemplares) en oro rojo con esfera azul y esferas auxiliares rodiadas. A pesar de la gran cantidad de información mostrada, las 10 agujas en total se identifican claramente con sus respectivas funciones gracias a una coherente combinación de material y color.
En el mundo no existe otro reloj que pueda compararse al Triple Split. Su desarrollo corresponde a una actualización natural del Double Split de A. Lange & Söhne presentado en 2004, que ya constituyó en su día un gran hito para el relojero sajón en el desarrollo de mecanismos de ratrapante modernos con un totalizador exacto de los minutos saltantes.
Posibilidades de aplicación del Triple Split
Con el Triple Split se pueden parar tiempos hasta 12 horas (ya de por sí una singularidad para un cronógrafo mecánico). La expansión de la función de la ratrapante al totalizador de las horas brinda numerosas posibilidades de aplicación adicionales. Por ejemplo, con el Triple Split se pueden comparar los tiempos de dos competidores de carreras de Fórmula 1, de una etapa del Tour de Francia o de una maratón. Pero también se pueden registrar los tiempos de dos acontecimientos sucesivos o añadir tiempos de acontecimientos de varias horas, como los tiempos de cada una de las disciplinas de la prueba Ironman. A su vez, durante el cronometraje de tiempos adicionales se pueden tomar a voluntad muchos tiempos intermedios.
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Medición de tiempos intermedios con el Triple Split
En la posición de salida se encuentran las tres agujas del ratrapante rodiadas sobre las correspondientes agujas del cronógrafo. El cronógrafo ratrapante comienza accionando el pulsador del cronógrafo situado a las 2 horas.
Los pares de agujas avanzan ahora sincronizados hasta que se separan por el accionamiento del pulsador del ratrapante situado a las 10 horas para medir un tiempo intermedio. Las tres agujas rodiadas se quedan paradas e indican el tiempo intermedio. Entre tanto, las agujas del cronógrafo de acero dorado o de oro rojo, ocultas hasta entonces, reanudan el cronometraje. En cuanto se vuelve a accionar el pulsador del ratrapante, sus agujas se vuelven a sincronizar con las del cronógrafo y siguen avanzando juntas.
El mecanismo está además dotado de una función flyback que actúa sobre los tres pares de agujas. Así, el cronógrafo se puede poner a cero durante un cronometraje en marcha accionando el pulsador situado a las 4 horas. Cuando se suelta, comienza instantáneamente un nuevo cronometraje.
Particularidades técnicas del calibre de la manufactura L132.1
El calibre Lange L132.1 es un mecanismo que entusiasma por su efecto tridimensional, su complejidad y su elegante diseño arquitectónico, en combinación con el acabado de sus piezas característico de Lange. Son en total 567 piezas minúsculas perfectamente coordinadas entre sí. Esta complejidad corresponde a una necesidad mecánica para hacer posible esta exclusiva función de Triple Split.
La realización de un mecanismo que puede controlar tres pares de agujas de forma sincronizada o independiente, supuso para los desarrolladores de Lange una enorme dificultad técnica. Ya de por sí, un mecanismo de ratrapante sencillo dispone de dos agujas sujetas en árboles interconectados. En el calibre L132.1 esta disposición se triplica. Los árboles con múltiples capas exigen durante el montaje del reloj un nivel máximo de precisión y delicadeza.
La mirada a través del fondo de cristal de zafiro revela el mecanismo del cronógrafo, acabado según el máximo nivel de calidad de Lange, con su interacción minuciosamente sincronizada de ruedas de avance, acoplamientos, balancines, palancas, resortes, y muescas de tope.
Cinco engastes de oro atornillados tradicionalmente en un puente decorado con pulido de bandas de Glashütte y el puente del volante grabado a mano completan su elegante aspecto. El Triple Split se muestra así, no sólo desde el punto de vista técnico, sino también por su acabado artesanal, como un reloj excepcional, único en su categoría de cronógrafos.
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